San Sebastián, fin de la cita o Por qué no soy Jurado del Festival

He tardado un poco en escribir este post porque ayer me pasé el día en la carretera (posiblemente en una vida anterior debí ser conductor de autobuses o algo así) y todavía no sé escribir un post y llevar un volante al mismo tiempo (aunque todo llegará).

Por otra parte, como se puede comprobar en mi anterior post, nunca seré Jurado en un Festival de Cine. No dí ni una, bueno sí, una sí. Pero era una Concha cantada: el premio a Marián Álvarez como mejor actriz. El resto, nada. Nunca pensé que una película tan pequeña como Pelo Malo iba a llevarse el premio gordo, ni que el director de Club Sándwich ganara una Concha, ni que Vivir es fácil con los ojos cerrados se fuera de vacío, ni que no le fueran a dar un premio a Antonio de la Torre que es el actor de moda... El premio del Jurado a La herida entraba dentro de lo normal, visto lo que había gustado a los críticos más crípticos del país (dicho con todos mis respetos que yo a los de Cahiers los admiro mucho y cuando sea mayor quiero escribir ahí). 

Si yo hubiera sido Jurado el único premio que habría coincidido hubiera sido el guión para Quai d'Orsay porque disfruté bastante con la afilada lengua del film de Tavernier. Aunque, en realidad, si hubiera sido Jurado este año lo que hubiera hecho es dar un golpe de mano, dejar desierta la Sección Oficial y dar los premios a las películas de Zabaltegui Perlas y me hubiera quedado tan ancha. Estos habría sido mis premios. 

Concha de Oro: Gravity (una maravilla, señores)

Mejor director: Miyazaki (por despedirse dejando una joya)

Mejor guión: Like father, like son (Kore-eda es un maestro en contar bien buenas historias)

Mejor actor: George Clooney (ya sé que sale 15' y solo se le oye, pero qué voz, my God!)

Mejor actriz: Lindsay Duncan (me encanta su personaje en About Time)

Reconoced que esto es un palmarés y lo demás son tonterías